Viaje tripulado a Marte

Un viaje tripulado a Marte consiste en el posible transporte de personas hacia dicho planeta. Ha sido motivo de discusión científica desde la década de 1950. Varias agencias espaciales han desarrollado proyectos a futuro, abarcando desde la realización de misiones cortas hasta la fundación de colonias y la adaptación a la vida humana del planeta. Asimismo, la presencia de humanos en Marte ha sido motivo de numerosas obras artísticas, en particular de ciencia ficción, incluidas las películas Misión a Marte, Planeta Rojo y The Martian.

Marte es el segundo destino estudiado para su exploración después de la Luna, ya que es el que tiene condiciones ambientales más similares al planeta Tierra.
Algunos de los obstáculos que hay que superar para concretar un viaje tripulado a Marte son:

Enfrentar los efectos de la exposición a radiación cósmica, radiación ionizante, baja gravedad y baja luminosidad.
Enfrentar el aislamiento de la vida en la Tierra durante varios meses.
Enfrentar la falta de servicios, en particular médicos.
Enfrentar, a lo largo del viaje, los problemas psicológicos derivados de una convivencia constante entre pocas personas, confinadas en un espacio minúsculo durante un periodo de alrededor de 6 meses.
Afrontar el altísimo coste de llevar a cabo el proyecto, en particular en relación a los beneficios generados.
Superar obstáculos tecnológicos para realizar el viaje, en particular disponer de energía para realizar el trayecto con personas a bordo, y generar oxígeno y agua para consumo humano.

A la velocidad que se puede lanzar a comienzos del siglo XXI una nave espacial, un viaje tripulado desde la Tierra hasta Marte de ida y vuelta -en las mejores condiciones de distancia y gravedad- se estima que llevaría entre unos 400 y 450 días terrestres.